La primera máquina tragaperras, creada en el año 1887 en Estados Unidos con el nombre de Liberti Bell, disponía en sus carretes caracteres compuestos por picas, corazones, diamantes y campanas de la libertad, que si el jugador de la época conseguía alinear, era premiado con un bote especial compuesto por un total de cincuenta centavos.
Más adelante se irían incorporando mas símbolos en sus carretes, así como ampliando el premio al que los jugadores podrían optar, y se solían colocar en salones de juego, casinos y bingos, donde la norma establecía que la maquina debía recaudar el 50 por ciento del beneficio obtenido, y el otro 50 por ciento del resto estaba destinado a premio para los jugadores.
Mas tarde, y pese a las distintas prohibiciones llevadas a cabo en varios estados de las maquinas tragaperras, se reintrodujeron en los años 30, y fueron parte fundamental de los bingos y casinos de las vegas; en la actualidad, el mayor mercado y donde mayores premios se reparte entre los jugadores es a través de internet.