Juegos recomendados en Bingoteca

martes, 31 de octubre de 2023

Como ganar al poker a un jugador de bingo

Los tres conceptos más importantes que rodean al juego del poker son: posición, posición y posición. La situación del jugador sobre la mesa y poder entrar en acción el ultimo (lo que se conoce en poker como ser el button) resulta crucial ya que te permite jugar las cartas contando con gran cantidad de información.

poker y bingo

Muchos jugadores profesionales de poker señalan que el poker es un juego en el que hay que tomar decisiones importantes utilizando una información incompleta. Si durante una partida de poker somos los primeros en entrar en acción, contaremos con menos información que nuestros oponentes y, por lo tanto, tendremos más posibilidades de que nuestra decisión sea incorrecta.

Jugando al poker contra un jugador de bingo

Supongamos que nos encontramos en el pre-flop (ronda inicial de apuestas en el Poker Texas Holdem), en una mesa con ocho jugadores, que somos el button y que nuestras cartas iniciales son AK, desde luego un mano muy buena. Además contamos con la ventaja de conocer de antemano los jugadores que continúan jugando la mano (callers).

Nuestro objetivo normalmente será que liderar la mano y aumentar la apuesta inicial (big blind o ciega grande) hasta cinco veces, sobre todo si ninguno de los jugadores anteriores han aumentado ya dicha apuesta (todos son limpers o, como en argot pokerístico se dice, han limpeado). La apuesta será arriesgada pero el poker no es un juego de bingo.

A la mayoría de los jugadores de poker les gusta jugar contra jugadores de bingo, ya que saben que si continúan jugando al poker de forma sólida, esperando por una buena mano, sus posibilidades de ganar a un jugador de bingo serán, de media, mucho mayores que la situación sea la inversa. La razón es porque los jugadores de bingo típicamente suelen hacer grandes apuestas con manos no muy fuertes.

Volviendo a nuestro ejemplo. Después de subir la apuesta cinco veces estaremos obligando a todos los limpers que quieran seguir jugando a elegir la apuesta. De seguro que algunos se retirarán de la mano pero otros (seguro que los jugadores de bingo lo hacen) continuarán jugado. Supongamos que de los ocho jugadores iniciales ya solo quedan cuatro.

En el flop (primer reparto de cartas comunes) aparecen sobre la mesa las carta 4-5-K, ciertamente no son unas cartas definitivas a la hora de asegurar nuestra victoria, pero sí que son alentadoras.

Por otro lado, después de haber subido durante el pre-flop, lo normal es continuar apostando en el flop. El objetivo es continuar con la historia de que todavía disponemos de la mejor mano sobre la mesa. Por eso podemos tomar la decisión de doblar el bote (obviamente no tomaríamos esta decisión de no disponer de un Rey [K]).

En este momento nuestros contrincantes tendrán muchas dudas sobre qué hacer, desde luego les estamos empujando a que se retiren ya que se trata de una gran apuesta. Además, gracias a haber aumentado la apuesta en el pre-flop, nuestros oponentes pensarán que en nuestra mano contamos con una pareja de Reyes K-K, o al menos con A-K o K-Q (en definitiva, K-algo).

Si los jugadores que hay sobre la mesa no nos conocen por no haber jugado contra nosotros lo suficiente, lo normal es que después de vernos apostar de esa manera, supongan que nuestra mano es la mejor sobre la mesa.

Desde luego, si como suelen hacer los jugadores de bingo, sistemáticamente tendemos a suponer que cuando alguien hace apuestas fuertes es porque se está tirando un farol, estaremos avocados a ser echados de la mesa de una manera realmente rápida. Si pensamos que los jugadores de poker hacen apuestas arriesgadas por norma, entonces perderemos nueve de cada diez veces que igualemos una apuesta muy alta.

Y ahora, si quieres poner en práctica lo que te hemos contando aquí, te aconsejamos que hagas clic aquí.

No hay comentarios: